Mónica Naranjo revela por primera vez la gran enseñanza que le dejó su polémico divorcio

Una de las artistas más multifacéticas de la actualidad sigue siendo Mónica Naranjo. Las grandes productoras vaticinaban un gran futuro sobre la chica que conoció a Salvador Dalí después de lanzar su primer disco, sin preveer que también estaba destinada al estrellato en televisión. La gironesa ahora está probando suerte en Netflix con un concurso, haciendo gala de sus ases bajo la manga, pero pocos le han consultado cómo lleva su soltería. Antes de su viaje a México por la gira programada, la gironesa reveló cómo está su corazón.

La presentadora de “La isla de las tentaciones” asegura que está pasando un momento armónico, lejos de los rencores hacia Óscar Tarruella, todo un “maestro” para ella. La cantautora de pop parece más segura que nunca de sí misma. Con el salto hacia “Amor con fianza” quizás pasó inadvertido el divorcio que se concretó en 2019, antes de la pandemia, en medio de tantas idas y venidas por parte de su exesposo. En un momento llegó a sentenciar que “le tenía miedo” a la pianista, pues le habría realizado fuertes advertencias que lo dejaron atónito.

Tú eres dueña de tu destino, tus actos y si decides que es el camino que tienes que tomar, hazlo.

Detrás de los rumores en torno a su persona, parece esconderse una joven sencilla que todavía descarta la importancia de cruzarse con Salvador Dalí. La presentadora no cree que se trate de una pintura surrealista, sino de la vida misma. Cada uno de sus días los vive especialmente desconectada, principalmente si le toca liderar un programa. Mónica Naranjo siente que ya encontró su centro, siendo honesta con el hecho de estar “de pasada” en la vida, según “Hola”. Ahora está al frente de un programa de Netflix que puede tener hasta más alcance que la televisión, y meses más tarde volverá a los escenarios de la tierra que más alegrías le dio. Llevará “Puro Minage” rumbo a México, todo un plan diseñado a su antojo.

La artista señaló ante “La Vanguardia” que las facilidades de ser una celebridad no la hacen “luchar” tanto como antes. Se maneja de una forma auténtica, alcanzando los objetivos que se propone en el medio, porque ya se siente “realizada”. La cantante entiende que es una fortuna de la vida llevar 30 años sobre los escenarios. “Mimetika” y el resto de los hits de su nuevo trabajo condecorarán esta trayectoria indiscutida para cualquiera. Después de estas décadas que representaron capas de miedo para Mónica Naranjo, promete quitarse aquel disfraz que lució este tiempo.

Yo siempre digo disfrazarte menos porque, a veces, nos disfrazamos mucho para suplir algunos miedos.

La presentadora está tan tranquila con su trayectoria musical que ya no se siente desprotegida. Puede que también aplique en lo personal, puesto que no demuestra ningún tipo de apuro en volver a enamorarse de alguien. Bromea ante “Hola” al deslizar que ama exclusivamente a su perro tras la última ruptura. El mantra de Mónica Naranjo es “amar para ser amado”, aunque también aconseja alejarse de las personas que decepcionan. Es su reflexión a la hora de añadir cómo atravesó la separación de Óscar Tarruella. El exesposo casi la demanda por supuestos “ataques” tras la separación. Según “Mujer Hoy”, ella no habría soportado la petición de divorcio de él, aunque lo desmintió. Siempre negó, al igual que en la última entrevista, que sintiera los niveles de aborrecimiento que le atribuyeron.