Amaia Montero envía un enigmático mensaje que enloquece a los fanáticos de "La Oreja de Van Gogh"

Amaia Montero empezó su exitosa carrera como vocalista de "La Oreja de Van Gogh" en diciembre de 1996. Sin embargo, en 2007 decidió que comenzaría su camino como solista y anunció que dejaba la banda, cuyo lugar fue ocupado por Leire Martínez.

Este 2021 se cumplen 25 años del inicio de "La Oreja de Van Gogh" y parecería que no le ha sentado para nada bien a Amaia Montero, quien se muestra cada vez más nostálgica en sus redes sociales y, si bien no lo dice, está claro que es por su exgrupo. 

Desde el 2018 que no hay noticias con respecto a la música de Amaia Montero, ya que en ese año publicó "Nacidos para creer", su último trabajo, pero ya sabemos que está a punto de lanzar su nuevo disco, y sus fanáticos están expectantes acerca de lo que escucharán. 

Amaia Montero no dio detalles de lo que brindará a sus seguidores con lo nuevo que tiene bien guardado bajo la manga, pero sí da pistas en sus redes sociales sobre una melancolía que invade su alma y sus seguidores no tienen dudas que es con respecto a "La Oreja de Van Gogh".

De hecho, la banda realizó recientemente un hilo en Twitter recordando los mejores momentos de estos 25 años de carrera, en los que no podía faltar Amaia Montero, claro, pues ella era un pilar fundamental en la banda.

Si hablamos de Twitter, la cantante de 44 años compartió varios mensajes que preocuparon a sus fanáticos por el tono nostálgico con el que escribió, pidiendo que no se preocupen por ella, y que no comentará más al respecto si le hace mal a quienes la siguen desde hace más de dos décadas.

Muchas veces me dan ganas de volver. Y ya no puedo dejar de pensarlo.

Amaia Montero volvió a dar una pista sobre lo que puede suceder en un futuro. Lo hizo en su cuenta de Instagram con una fotografía en blanco y negro, lo que podría leerse como algo nostálgico. Por si quedaban dudas, ella misma acompañó la imagen con un mensaje que solo los fanáticos de "La Oreja de Van Gogh" entenderían.

Tengo tantas cosas que contar.