Todo sobre el lugar en el que Mario Vargas Llosa se internó para conquistar a Isabel Preysler

Isabel Preysler pasó por diferentes amores a lo largo de su vida. Desde Julio Iglesias hasta Mario Vargas Llosa, siempre eligió a su compañero no solo por su belleza y su físico, sino que también por su intelectualidad, pues esto sería lo que más le atrajo del escritor.

En 2015, Isabel Preysler oficializó su romance con Mario Vargas Llosa, al poco tiempo de conocerse el fallecimiento del padre de Ana Boyer, la única hija que tuvo con Miguel Boyer, quien perdió la vida el 29 de septiembre de 2014. 

Sin embargo, Isabel Preysler continuó con su romance con el peruano, a pesar de las críticas que recibió la pareja por la pronta "recuperación" del luto de la socialité. Algo muy curioso en este amorío es que Mario debió someterse a una clínica para sorprender a su amada. 

Y es que el Premio Nobel de Literatura se encontraba excedido de peso cuando estaba con su todavía esposa, Patricia Llosa , la boliviana con quien estuvo 50 años casado, toda una vida que dejó atrás por Isabel Preysler, pero tenía que ganarse su corazón, ¡y vaya que lo hizo!

Mario Vargas Llosa visitó durante dos décadas la clínica marbellí Buchinger, a donde acudía para relajarse junto a Patricia, y en donde le realizaban drenajes, masajes con disciplina oriental, y una dieta estricta a base de zumos naturales, caldo y té. Tras 20 años sin faltar a esta cita de 15 días, dejó su segundo hogar por amor y cambió el centro por otro similar, recomendado por la madre de Enrique Iglesias.

En "Buchinger", Isabel Preysler y Mario Vargas Llosa pasaron algunos días, y pagaban entre 6.065 y 30.935 euros por someterse a tres semanas de ayuno terapéutico, pero todo cambió cuando "la reina de corazones" le dijo que lo mejor era cambiar por el centro "Sha Wellness", ubicada en Alicante.

En la página oficial del lugar preferido de Isabel Preysler comentan que esta dieta estricta tiene dos metas. La primera es "recuperar el bienestar" mediante la desconexión total del exterior, sin artefactos electrónicos (celulares) y, por otra parte, seguir con el tratamiento una vez que hayan abandonado el establecimiento para crear los hábitos adquiridos en "SHA".

Este centro de salud es recomendado para personas que sufren de sobrepeso o que tienen problemas alimenticios. Un espacio ideal para olvidarse de lo que sucede en el mundo y enfocarse en el bienestar personal, algo a lo que le son fiel tanto Isabel Preysler como Mario Vargas Llosa, quien dejó su antiguo centro para acompañar a quien sería el amor de su vida.

Están diseñadas para mejorar el estado general de la salud, todo ello en línea con un concepto de vivienda elegante asociado con la filosofía Feng Shui, para preservar el impacto de cada elemento de su cuerpo, y para mejorar los efectos positivos de vivir en uno de los mejores microclimas del mundo.