CLÁSICA DE VERANO
La mejor receta de Coleslaw, la ensalada que merece un lugar en todas tus mesas festivas
Esta es una de esas recetas que merece ser siempre recordada, pues sencillamente lleva tus menús con carne a otro nivel.
Es muy habitual que en nuestras comidas la carne tienda a ser la protagonista y, por ende, se nos suelen terminar rápido las opciones de acompañamiento. Para esos casos es que la coleslaw se presenta como una opción salvadora. Va perfecto para cualquier tipo de carne a la parrilla o al horno, para hamburguesas o incluso para costillas a la barbacoa, y así obtendríamos el clásico estadounidense que tanto hemos visto en las películas.
Ingredientes para 4 personas:
½ col blanca
2 zanahorias
½ manzana
2 cucharadas de mayonesa
4 cucharadas de crema agria
2 cucharadas de mostaza de Dijon
Vinagre
½ cebolla
Procedimiento:
Comenzaremos la coleslaw cortando la col en rodajas muy finas, debido a la forma de la hortaliza, obtendremos una juliana casi en forma de hilos. Cuando esté toda cortada la colocaremos en un en recipiente amplio y entonces rallaremos las zanahorias y la manzana, también en el menor grosor que sea posible. Lo mismo haremos con la cebolla.
Posteriormente nos pondremos a trabajar todos los ingredientes con las manos, previamente lavadas, con el objetivo de que las materias primas se mezclen entre sí y, además, con la fuerza de los dedos empiecen a largar sus jugos naturales y a ablandarse. En un bowl aparte prepararemos la salsa, para ello mezclaremos la mostaza, con la crema, la mayonesa y el vinagre y batiremos ligeramente con la ayuda de un tenedor o de un batidor. Ya casi terminamos.
Para que la coleslaw llegue a su fin, solamente restará volcar el aderezo sobre la mezcla de hortalizas y mezclar para que todo se impregne. Antes de servir, es importante que la refrigeremos al menos por una hora, pues el frío hace que sus sabores dulces combinen mucho mejor con la sabrosura de las carnes a la parrilla. En esta instancia, déjennos recomendarles la receta de costillas a la barbacoa, pues así ya tendrán un panorama completo de cómo servir un menú netamente norteamericano al que nadie podrá resistirse. ¡Buen provecho!
