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3 rellenos de tartas saladas para que las cenas dejen de ser un problema
La variedad es la clave del éxito en todo buen cocinero.
No sabemos por qué las cenas son tan problemáticas, pero sabemos cómo resolverlo: con tartas saladas. Este es un menú ideal para las noches de invierno ya que prender el horno nos ayudará a calefaccionar el hogar. Pero en verano, podemos preparar varias de una sola vez y consumirlas al otro día en frío, pues le aseguro que saben mucho mejor aún. Existen tantas posibilidades de relleno como tu mente creativa te lo permita, pero si estás un poco apagado, entonces te apuntaremos tres rellenos de tartas saladas como para que nadie te acuse de falta de variedad en tu mesa.
Tarta Caprese
Para este relleno de tarta necesitaremos 250g de queso fresco, un buen manojo de hojas de albahaca fresca, ½ kg de tomates, 3 huevos, 1 disco de masa, sal, pimienta y 100ml de nata líquida. Comenzaremos la preparación blanqueando la masa y, para ello, la colocaremos en un molde circular apto para horno previamente enmantecado para evitar que se pegue. Con un tenedor haremos algunos orificios en la superficie y en los costados y la enviaremos a horno medio durante 20 minutos. Solo buscamos que se cocine ligeramente.
Posteriormente mezclaremos en un bowl los huevos con la nata, los tomates cubeteados, la albahaca picada y el queso en trozos pequeños. Salpimentaremos al gusto y luego volcaremos la mezcla en la masa. Volveremos con todo al horno y cuando observemos que los huevos se cuajaron y el queso se derritió, la tarta caprese ya estará lista.
Tarta de Cebolla
Esta tarta es una de las más económicas en cualquier recetario y su sabor es sencillamente espectacular. Para este relleno de tarta salada necesitaremos 1kg de cebollas, 2 huevos, sal, pimienta, orégano, y 100g de queso fresco. Nuevamente blanquearemos la masa como indicamos anteriormente y enseguida cortaremos toda la cebolla en plumas. Luego la pondremos a cocinar en una sartén con un poco de aceite y no agregaremos nada más hasta que esté completamente tierna y cocida. Recién entonces condimentaremos con sal, pimienta y orégano. Agregaremos los huevos para ligar, el queso en cubos y verteremos la preparación en la masa. Al cabo de 20 minutos la tarta de cebolla ya podrá degustarse.
Tarta de jamón y queso
El clásico de los clásicos es la tarta de jamón y queso, probablemente por la versatilidad de sus ingredientes. En este relleno de tarta salada no nos complicaremos para nada, ya que no cocinaremos más que unos huevos. Necesitaremos 2 discos de masa, 250h de jamón de york, 250g del queso que más te guste y 3 huevos. Como adelantamos antes, lo primero que haremos será cocinar los huevos hasta que estén duros. Luego acomodaremos la masa en el molde, la pincharemos con un tenedor y enseguida acomodaremos las lonchas de jamón de manera irregular para crear volumen. Encima pondremos los trozos de queso y finalmente añadiremos los huevos cortados en trozos. Colocaremos la otra masa, cerraremos por el borde, pincharemos nuevamente y cocinaremos por 30 minutos o hasta que observemos que la masa está dorada.
Como habrán notado, las tartas saladas son grandes aliadas de la cocina de aprovechamiento y de la practicidad y solo es cuestión de ejercitar la imaginación para conseguir combinaciones espectaculares. Aquí pueden ver nuestra selección de ensaladas ligeras por si necesitan opciones de cenas más livianas. ¡Buen provecho!
