La familia real no se ha tomado para nada bien el comunicado de la Infanta Cristina

"De común acuerdo, hemos decidido interrumplir nuestra relación matrimonial. El compromiso con nuestros hijos permanece intacto. Dado que es una decisión de ámbito privado, pedimos el máximo respeto a todos los que nos rodean. Cristina de Borbón e Iñaki Urdangarin". Este ha sido el comunicado con el que toda España inició la semana como para despabilar y empezar entre noticias turbulentas. Por supuesto, esto no deja exenta a la familia de la Infanta Cristina que cada vez más cierran el círculo y se mantienen herméticos ante la arremetida mediática.

Si en algo están de acuerdo la inseparable hermana de la exduquesa de Palma, la Infanta Elena y su hija Victoria Federica es que de ellas no saldrá ni un pitido, un monosílabo, nada y así se mantienen mientras se espera a que sea la Infanta Cristina quien decida encarar a los medios por ella misma, cuestión que tarde o temprano será inevitable.

Las cámaras de Europa Press y la revista "¡Hola!" captaron recientemente a la Infanta Elena abordando su coche para salir en dirección hacia Mapfre a tempranas horas de la mañana, pero decidió hacer caso omiso a la presencia de los periodistas que aguardaban desde temprano afuera con incesantes preguntas sobre este reciente comunicado que ha tomado a todos por asalto. El silencio fue sepulcral.

Algo similar también ocurrió en el caso de la sobrina de la Infanta Cristina, Victoria Federica, quien en anteriores días reaccionó con cierta violencia ante los equipos de reporteros que querían saber sus impresiones sobre esta noticia. En un nuevo intento, los medios han abordado a la joven aristócrata y el cuadro no fue menos. Aunque esta vez decidió no confrontar, el semblante de la influencer demarcaba tristeza y fue su novio, el DJ Jorge Bárcenas, quien decidió salir al paso y establecer límites.

Hubo un cierto momento en el que el músico ve a su novia visiblemente agobiada intentando quizás esconderse entre su mascarilla. Este gesto involuntario de incomodidad fue el detonante que hizo actuar al inseparable escudero de Victoria. Intentó poner mano a la cámara y exigir a los presentes que dejarán de apuntarlos y filmarlos. "Vale, pues por favor, ya está", pidió al comienzo de la grabación. "¡Basta ya! En serio, ya está. Por favor".

Quien quizás mantuvo la calma con mayor ecuanimidad fue María Zurita, prima de la Infanta Cristina, quien también fue abordada a propósito del escándalo. Con mucha tranquilidad, decidió zanjar la ola de preguntas con la respuesta más tajante pero educada a la que pudo recurrir: "Os agradezco de verdad vuestro interés, pero de verdad de mí no vais a sacar nada. Os agradezco en el alma pero no insistáis en esperarme porque no voy a hablar ni ahora ni nunca". Tal como se puede ver, la exduquesa cuenta con el apoyo de su familia en todos los niveles y de verdad necesitará de ellos, porque los peores días están por empezar.