La "traición" y copia de la Reina Letizia que tomó a todos por sorpresa en su viaje a Alemania

La Reina Letizia lo volvió a hacer. Uno tras otro, todos los estilismos que ha lucido en lo que va de este viaje a Alemania podrían ser calificados como los más acertados —con un sastre color fucsia en la recepción y un vestido floral en la ceremonia oficial en su llegada junto al Rey Felipe—, pero ha sido su elección para asistir a la cena de Estado —ofrecida por sus anfitriones durante la noche de este lunes—, el momento más destacado y la que ha puesto a toda la prensa alemana a sus pies.

Sin guiños de diseñador, sobriedad excesiva o un nuevo tributo al "Made in Spain" en esta oportunidad, la fórmula de la Monarca para deslumbrar fue el mayor de sus éxitos: volvió el efecto "rojo Letizia" y con uno de los diseños icónicos que resultó inolvidable para los medios especializados en moda: se trata del hermoso modelo de Stella McCartney con el que la Consorte asistió al cumpleaños 50 del Rey Guillermo de Holanda, y que, por cierto, dejó sin palabras a la mismísima Carolina de Mónaco aquel 27 de abril de 2017 cuando lo usó por primera vez.

Se trata de un vestido de silueta recta "con cuello a la caja y capa lateral a modo de manga asimétrica", tal como lo describe la revista ''¡Hola!", al que acompañó con detalles que nos recuerdan al día en que lo mostró al mundo por primera vez. Para esta cena de estado, la Reina Letizia optó por recoger su cabello y no llevó ondas sueltas, por ejemplo, mas sí apostó por detalles en color plateado como sus zapatos de Jimmy Choo y pendientes largos efecto cascada confeccionados con diamantes y rubíes, a juego con una pulsera floral, también con la piedra color granate como destacable protagonista.

¿Un detalle infaltable en el estilismo de la Reina Letizia? Por supuesto, su inseparable anillo dorado de Karen Hallan, obsequio de sus hijas y que, por supuesto, ya se ha convertido en una extensión de su dedo índice, pues nunca se desprende de él así no combine con lo que lleva puesto. Se siente tan cómoda y comprometida con él, que le resulta imposible reemplazarlo por otras piezas.

Este es uno de los mayores aciertos con los que la Reina Letizia triunfó en el escenario internacional y que, como señalamos anteriormente, incluso deslumbró a la icónica Princesa monegasca, quien luego lo encargó un año después para lucirlo en la cena de gala del Día Nacional de Mónaco. El revuelo que causó no fue menor, porque, por primera vez, la musa del desaparecido diseñador Karl Lagerfeld rompió su propia tradición y prescindió de la casa Chanel para vestirla en aquella ocasión especial del 2018 y aunque definitivamente fue una gran opción y la Princesa Carolina siempre ha sido un 10/10 en cuanto a moda y estilo, hay que decirlo: a la esposa del Rey Felipe le sentó muchísimo mejor.