España es un país tan prolífero en estrellas que cada día hay una efeméride vinculada a un artista (o a varios) digna de ser recordada. Por supuesto, Concha Márquez Piquer y Curro Romero no son la excepción, menos si estamos en el mes de octubre. Y es que el día 22 de este mes, pero del año 1962 (hace 60 años), la pareja confirmó su amor en el altar de la iglesia de los Jerónimos, en Madrid.

Eran tantas las personas que se dieron cita en la iglesia para ser testigos de lo que luego se conoció como “la boda del siglo”, que los novios y los invitados tuvieron que ingresar por la sacristía. Pero ya en aquel entonces se dieron una serie de situaciones que permitieron vaticinar un futuro no muy feliz a los más intuitivos.

Según una minuciosa recopilación de material que ha hecho Vanitatis, la cantante olvidó su ramo de flores en casa y un cerrajero tuvo que forzar la puerta para que pudiera casarse en condiciones. Solo ese pequeño contratiempo demoró la ceremonia unos 20 minutos. Por aquel entonces todavía Curro Romero no tenía intenciones de correr despavorido, o al menos lo disimulaba muy bien en público.

Los inicios de una historia amarga entre Concha Márquez Piquer y Curro Romero

Según ha informado el citado medio, Concha Márquez Piquer tuvo que ser atendida de urgencia al terminar la ceremonia porque sufrió una lipotimia producto de no haber comido en todo el día. Horas más tarde llegó el festejo y, tras eso, la luna de miel que comenzó por Palma de Mallorca y con Curro Romero haciendo eso que más le gustaba, pero que su esposa aborrecía: torear.

El diestro no simpatizaba con la profesión de la madre de sus hijas, razón por la que ella se apartó de la música en los primeros años de su matrimonio. A ella tampoco le agradaba el trabajo de su marido, pero no logró imponerse como para que él también dejara su carrera. Enseguida comenzaron los dramas propios de las deslealtades en un vínculo que parecía tener más desencuentros que motivos para estar juntos y, cuando ya llevaban 14 años, se convirtieron en unos de los primeros en hacer uso del derecho al divorcio. Aunque eso sí, la nulidad del matrimonio por iglesia Curro solo la consiguió cuando la artista falleció y, desde entonces, no ve la hora de casarse con Carmen Tello, su segunda esposa y; para muchos, el verdadero amor de su vida.

No podía ser otra cosa que estrella

Concha Márquez Piquer nació en Buenos Aires en diciembre del año 1945.  Fue hija del torero Antonio Márquez y de la tonadillera Concha Piquer, con lo cual, estaba destinada a brillar en los medios y en los escenarios.