Los desastres estilísticos que ha tenido la Princesa Leonor en su fecha más importante del año

La llegada de la Princesa Leonor a España es, sin dudas, la ocasión más importante que ocupa a Casa Real esta semana, de cara a su presentación más importante del año al presidir nuevamente los Premios Princesa de Asturias en el Teatro Campoamor de Oviedo y en el que se espera una actuación no menos que formidable de su parte, tal como ha ocurrido desde que se convirtió en la verdadera protagonista de esta gala en 2019.

Es una completa obviedad señalar que la preparación de la heredera es crucial y, sin duda alguna, ha podido demostrar su capacidad para equilibrar sus compromisos institucionales y su desafiante tren de responsabilidades en cuanto a sus estudios en el elitista colegio Atlantic College. Su evolución ha sido tremenda en cuanto a su puesta en escena cada vez más segura y cómoda, pero además ha sido notable su transformación en cuanto a los estilismos que ahora lleva en franca comparativa con aquellos que la han acompañado casi toda su vida.

Desde su debut en 2019, una máxima de protocolo es el uso constante de vestidos y ese día no fue la excepción. La Princesa Leonor llevó un modelo en color azul celeste favorecedor para su edad, tenía apenas 14 años en aquellos días, y las zapatillas estilo ballerinas en color dorado cerraron un look en el que, claramente, no había intención alguna de cambiar lo establecido, una visión angelical y aniñada de la Princesa de Asturias.

La fórmula luego se repitió en 2020, en medio de una situación mundial atípica, y, aún ante la incertidumbre, hubo además cierto cambio que definitivamente no cautivó a las audiencias: si había cierta crítica alrededor de la recurrente fórmula de aplicar para la Princesa Leonor y Sofía el estilo "twin" con ropas casi idénticas, el resultado fue peor al siguiente año, con un vestido en dorado tenue con superior bordado y falda lisa y caída recta, que en definitiva no le sentó de mil maravillas. Más sinceros todavía, era un estilismo que bien pudo usar la Reina Sofía. Sin ofender.

En vista del fracaso anterior, para 2021 la apuesta subió al máximo para la Princesa Leonor en un estilo que hasta el momento nunca se le había visto, por el largo de la falda de su vestido, mucho más corto. Esta vez eligió un lindo modelo con lazada a la espalda, cabello recogido para despejar su rostro y unos salones negros más altos que en los de la edición anterior. Si bien causó cierto revuelo entre las facciones más conservadoras, frente a lo anterior, fue su estilo más rompedor en estos premios.

Por supuesto, las expectativas exceden este año, si en su presentación de los Premios Princesa de Girona lució su estilismo mejor logrado, con cabello recogido a moño, maquillaje, un poético vestido azul celeste con entre rizado frontal y salones nude. ¿Mejorará este año en los Princesa de Asturias?