La espera terminó y los planes se concretaron: Sonsoles Ónega ya está en marcha con su nueva apuesta televisiva en Antena 3 y todo parece indicar que el cambio de compañía le ha sentado muy bien, tanto a ella como al canal. Mientras tanto, sus excompañeros lo dan todo por no perder espectadores y en ese grupo está incluida Ana Rosa Quintana.

La salida de la comunicadora de Telecinco fue un verdadero escándalo producto de las razones por las que lo hizo: lisa y llanamente, porque la competencia le hizo una oferta que no pudo rechazar. Ese movimiento no fue entendido por todos sus colegas y compañeros de plató, quienes lo interpretaron como una auténtica traición. Sin embargo, parece que a Sonsoles le han quedado algunos amigos.

La revista “Lecturas” ha dialogado con la madrileña producto del éxito que está cosecha y, probablemente, producto de que ya sabe que su proyecto funciona, se ha animado a ser más clara con respecto a un aspecto en particular: cómo han quedado las cosas con Ana Rosa Quintana. En ese sentido, hace algunas semanas aseguró que seguían en contacto y que la había felicitado por su regreso tras la pausa por su problema de salud, pero recién ahora ha sido más específica.

Sonsoles Ónega, Ana Rosa Quintana y una pena que no puede quitarse

Ante el citado medio y luego de revelar lo contenta que está, Sonsoles Ónega desveló que le hubiese gustado estar para la reincorporación de Ana Rosa Quintana. Luego de su declaración, Sonsoles intentó matizar su angustia al manifestar que lo verdaderamente importante es que ya su colega ejerce nuevamente su profesión, algo que ella y todos los que se desempeñan en Telecinco esperaban desde el momento en que se marchó.

La pena o lo no calculado es que me he perdido ese momento con ella, a su lado.

Es evidente que las cosas no han quedado del todo bien entre la hija de Fernando Ónega y quienes compartieron plató con ella en su empleo anterior. De todos modos, ella está segura de que algunos excompañeros se alegraron en cuanto supieron la propuesta que tenía entre manos. Ana Rosa Quintana seguramente pertenece a ese grupo, pero de todos modos a la periodista le quedó el mal sabor en boca por no haber calculado mejor los tiempos de su retirada.

Una comunicadora de renombre

Sonsoles Ónega nació en Madrid en noviembre del año 1977. Es presentadora y escritora, aunque su especialidad son los medios audiovisuales, en los que combina noticias duras con matices de la crónica del corazón.