Paloma Rocasolano en Asturias: dos errores por los que podría no ser invitada el año que viene

En cada edición de los premios Princesa Princesa de Asturias, la Princesa Leonor es definitivamente la gran protagonista de este evento estelar, aunque en ocasiones, la atención mediática y con justa razón se desvía fuera del bonito cuadro familiar. En esta edición no solo han sido los looks rompedores de la heredera, la Infanta Sofía (que como nunca estelarizó titulares) y la Reina Letizia, los que dieron la nota alta en esta celebración en el Principado, la abuela plebeya de Leonor, Paloma Rocasolano también fue noticia por un par de motivos verdaderamente notables.

Sabemos de antemano que las comparaciones son casi siempre odiosas, pero en este sentido, la madre de la Consorte no pudo evitar un cara a cara estilístico con la Reina Sofía, al elegir un conjunto chaqueta pantalón un tanto similar a los que en muchas ocasiones hemos visto a la Emérita, e incluso ambas coincidieron con el mismo color, solo que en el caso de doña Sofía, la tela de su traje era satinado en azul Klein, y el de Paloma Rocasolano en un material menos brillante pero con el mismo tono de azul.

Por esta nueva ocasión, la exenfermera ha acudido a esta cita en solitario, sin su novio el empresario Marcus Brandler con quién lleva algunos años de relación sentimental. Sin embargo, han escogido llevar este noviazgo de forma discreta y por supuesto, presentarse juntos en esta gala podría convertirse en una distracción innecesaria, pues todo el brillo y las luces de los focos deben ir en dirección a la Princesa Leonor en su momento más estelar del año.

Sin embargo, no conforme con esta casualidad de estilo, nuevamente un gesto por parte de Paloma Rocasolano, terminó por llamar la atención justo en medio del discurso de la Princesa Leonor y es que los arranques emotivos de la asturiana siempre destacan. Como ocurrió en el debut de 2019, cuando sus exaltados gestos de cariño y ternura hacia su nieta quedaron inmortalizados como una curiosidad, nuevamente la situación se repitió este viernes, cuando dejó caer algunas lágrimas y debió ser contenida por una acompañante sentada justo a su lado.

Siendo así, ya se convierte en casi una máxima que en algún momento, Paloma Rocasolano convierta sus apariciones en los Premios Princesa de Asturias como uno de los temas más destacables de cada edición que además, cuesta algunos segundos del foco principal. ¿Qué opinión le merecerá esta situación a la siempre correcta Reina Letizia?