REINA SOFÍA

La relación 80-60 que devasta a la Reina Sofía: 84 primaveras y 60 años de desamor

Su idílica historia de amor se desvaneció justo después de este momento y aún lleva esta cruz a cuestas.
jueves, 3 de noviembre de 2022 · 04:45

La Reina Sofía ha cumplido 84 años y pareciera que esta importante fecha para la familia real ha pasado por debajo de la mesa. A diferencia de otras casas reinantes, nuestros representantes royal no suelen hacer mayor fanfarria al respecto. Además, hay que tener en cuenta la historia intrafamiliar que ha marcado el presente y el futuro de la Reina Emérita, con una familia desarticulada y su esposo, el Rey Juan Carlos, en Abu Dabi.

El Rey Juan Carlos y la Reina Sofía en sus primeros años de casados. Fuente: (Foto de archivo)

En el caso de los reyes eméritos, esta distancia geográfica de dos años podría ser un paseo en barco frente a un matrimonio de 60 años pactado desde la conveniencia en su inicio y rematado por una traición que la Reina Sofía fue incapaz de perdonar. De hecho, la felicidad del matrimonio simplemente cesó a partir de un momento clave que marcó seis décadas de triste unión obligatoria.

Tal como temía la Reina Sofía, después del fallecimiento de Franco, el pulso descontrolado del empedernido exmonarca no tendría forma de ser controlado, y no estaba equivocada. Al poco tiempo de este hecho, descubrió la primera infidelidad de su esposo. No fueron rumores, no hubo alguna actitud sospechosa que la hiciera dudar. Fue testigo presencial de la peor escena que puede enfrentar una mujer enamorada: el ver al amor de su vida en los brazos de otra mujer como gratificante premio después de una jornada de cacería. La Reina Sofía deseaba sorprenderle gratamente al visitarle junto con sus tres hijos, y, según se ha comentado, el Príncipe Felipe y las Infantas Elena y Cristina, todos en sus más tiernas edades, habrían presenciado aquel dantesco cuadro. Esto ocurrió cuando la Emérita contaba con la edad de 37 años.

Entre los reyes eméritos, la cortesía es más institucional que personal. Fuente: (Foto de archivo)

Hoy es de público conocimiento que este hecho fue de los primeros de un groso prontuario extramatrimonial, en el que incluso el Rey Juan Carlos contó con colaboradores internos y hasta los servicios secretos se prestaron para impedir que los escandalosos affaires no escalaran hacia la vista pública. Mientras tanto, según lo expuesto por Pilar Eyre en una de sus afamadas crónicas, desde hacía rato, la Reina Sofía ya había decidido dormir separada de su aún esposo. Esta decisión la tomó en 1976, un año después de la coronación del Rey Juan Carlos.

Separada por un saloncito, un despacho y dos cuartos de baño, han preparado otra alcoba para el Rey. El mayordomo informa, apurado: 'Así lo ha dispuesto la señora'. Juan Carlos se encoge de hombros y se va a su nuevo y solitario dormitorio. ¡Desde ese día, el matrimonio separó habitaciones y nunca más volvieron a dormir juntos!.

En la actualidad, y después de toda el agua que ha pasado por debajo del puente, ya no parece que haya nada que perturbe ni espante a la Reina madre. Incluso se dice que, incomprensiblemente, ella ha intentado mediar con el Rey Felipe para traer al Emérito de regreso a España desde el exilio. Quizás, de todas sus preocupaciones y desasosiego, la soledad en la vejez los ha acercado después de todo. En estas edades doradas, estar cerca de la familia es simplemente un lujo. Uno que el dinero, los lujos y los trofeos de caza no pueden pagar.

Cargando más noticias
Cargar mas noticias