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Santiago Pedraz, la frase demoledora que Esther Doña no se esperaba
El ex de la socialité española ha roto el silencio tras el escándalo.
La relación de Esther Doña y Santiago Pedraz terminó de la peor manera. Después de la polémica desatada por la extraña ruptura, a pocas horas de anunciar su compromiso de boda, los dichos de un lado y de otro solo los han puesto a contrariarse de una manera que pocos imaginaban y en la que han surgido incluso amenazas. De momento, se conoce que la viuda de Carlos Falcó podría recurrir a un recurso legal en contra de su expareja, lo que podría desatar una riña mediática.
Es así como han surgido varias informaciones delicadas luego del escándalo entre Esther Doña y Santiago Pedraz, como la acusación de la marquesa de Griñón sobre que él se habría beneficiado económicamente de su relación, participando en una entrevista en su revista de cabecera.
La socialité podría estar preparando una jugosa venganza en contra de su ex. Así, se rumorea que podría conceder una exclusiva en la que haría públicos los entresijos de la relación que mantuvo con Pedraz y que tan mal acabó. Por supuesto que ante toda esta latente amenaza se encuentra la posición de Santiago Pedraz, quien de momento se mantiene callado y no dudaría en jugar su carta más pesada.
Esther es pasado para mí
En este contexto, el Juez español viene a pronunciar unas palabras demoledoras que, lejos de mejorar la situación con Esther Doña, podría empeorarla. De momento mira a quien fue su novia por más de un año como parte del pasado, y no quiere saber nada de ella. Según un reporte del diario "20 minutos", Santiago Pedraz está muy seguro de sus nuevos sentimientos y no pretende volver atrás, además no quiere opinar sobre los últimos dichos de Esther: "Esther es pasado para mí. No he visto su entrevista ni tengo ninguna intención de verla. Hice lo que tenía que hacer y por ello estoy tranquilo".
De momento, no se conoce si el juez español pensará en ofrecer alguna exclusiva sobre lo que ocurrió con su exmujer, pero las ofertas no paran de lloverle, en un contexto donde la tensión aumenta.
