Huevos tontos, una delicia de aprovechamiento tan útil que debería tener un premio

En el recetario español clásico hay algunas preparaciones que tienen que estar sí o sí porque pertenecen a nuestra historia. Ese es el caso de los huevos tontos, una comida que probablemente fue bautizada así por la simpleza en su preparación y por los pocos ingredientes que lleva. Era la joya de las abuelas en las épocas en las que la variedad de productos en una encimera era una utopía y había que resolver con lo que había. Sin embargo, el resultado es sencillamente espectacular.

Ingredientes para 3 porciones de huevos tontos

300g de pan duro

300ml de leche

2 huevos

2 dientes de ajo

Perejil fresco

Sal

Pimienta

Aceite para freír

Cómo hacer huevos tontos

Comenzaremos los huevos tontos cortando el pan en trozos pequeños y cuando lo tengamos listo, lo colocaremos en un recipiente amplio en el que agregaremos la leche de a poco. Tengan en cuenta que la leche es para embeber el pan, pero la preparación no tiene que quedar demasiado líquida.

Con ayuda de un tenedor desarmaremos un poco el pan y luego le daremos sabor a la mezcla con los ajos finamente picados, una buena cantidad de perejil fresco también picado, sal y pimienta. Agregaremos los huevos, integraremos todo y pondremos a calentar el aceite en una sartén profunda.

Cuando estemos seguros de que el aceite está caliente, formaremos bolitas con ayuda de dos cucharas, como si estuviésemos preparando croquetas. Las cocinaremos en la fritura hasta que estén doradas, las escurriremos en abundante papel absorbente y ya podremos disfrutar de los huevos tontos. Les recomendamos que los sirvan acompañados de alguna salsa fresca para contrarrestar la fritura, por ejemplo, una rica pico de gallo. ¡Buen provecho!