Kiki Morente se derrumba con Bertín Osborne por una historia que no tiene que ver con Sara Carbonero

"Mi casa es la tuya", presentado por Bertín Osborne, emitió uno de sus programas más especiales y particulares, pues ha viajado a Albaicín, en pleno corazón de Granada, para entrar al hogar de Kiki Morente. El intérprete recibió al presentador con los brazos abiertos y habló de los temas que más lo sensibilizan, como la muerte de su padre. 

La pérdida de Enrique Morente sucedió en el 2010, cuando Kiki Morente tenía sólo 20 años. El artista falleció días después de ser operado de cáncer de esófago, pero pasó de una forma tan rápida que ha marcado para siempre a su familia. Su hijo ha recordado aquel momento tan duro como un “hostión de la vida”, pues fue algo que no esperaban. 

Luego de la muerte de su padre, el cantante y su familia denunciaron al personal médico que atendió a Morente por negligencia, pues siempre sostuvieron que se podría haber evitado. Tras un periodo de lucha, un informe forense determinó finalmente que la atención médica fue la adecuada. Si bien la familia no quiso entrar en estos detalles legales, sí hablaron sobre el artista durante la entrevista. 

Recordando los momentos previos a aquel triste desenlace, Kiki Morente desvela que "Trabajé con mi padre diez días antes. No parábamos en esa época de currar. Son cosas que pasan, entré con mi padre al hospital y… Fue de golpe y porrazo". Además, el cantante muestra toda su vulnerabilidad al lamentar todo lo que le ha faltado aprender de él.

“Y yo que estaba harto de escuchar y aprender y todo lo que me ha faltado, de alguna manera, entre mi madre y mis hermanas me reúnen mucha parte de él y a día de hoy sigo aprendiendo mucho”, dice Kike a Bertín Osborne, quien seguía concentrado la entrevista, notando la emoción de la familia Morente.

Kiki Morente ha confesado que lo ha pasado mal por cargar con la responsabilidad de ser hijo de un artista inigualable, dedicarse a lo mismo y, encima, llamarse igual que el cantaor. "Yo lo he pasado fatal", ha desvelado, quedándose en silencio, bloqueado, frente al recuerdo de su padre.