“Cuéntame” dejará de emitirse por razones que van mucho más allá de la audiencia

Con “Cuéntame” está sucediéndonos lo mismo que con Joan Manuel Serrat: obligadamente tenemos que enfrentarnos a sus finales. El artista lo hace porque siente que le ha llegado el momento del retiro y prefiere apartarse ahora de la actividad profesional, antes de que sea demasiado tarde y el esplendor que emana se transforme en sombras propias del ocaso. Sin embargo, con la telenovela más longeva de nuestra historia, el proceso no parece ser tan natural.

Hace algunas semanas se confirmó que “Cuéntame” no renovaría por una nueva temporada y entonces comprendimos que la historia de la familia Alcántara está por caducar. Inmediatamente, comenzaron a surgir los interrogantes y entonces nos encontramos con una explicación que no resultó nada sorprendente: las mediciones de audiencia no son las que se esperaban, de modo que a la productora no le conviene seguir adelante con un proyecto que no es tan rentable; lo cual es totalmente lógico si no perdemos de vista que la ficción es, en esencia, un negocio.

Pero parece que la verdadera razón por la que la telenovela no seguirá deleitando a los españoles es porque en el fondo hay un inconveniente todavía más profundo que la falta de éxito, aunque es probable que, si el caso se analiza en profundidad, descubramos que uno es la consecuencia del otro: “Cuéntame” llega a su fin porque los televidentes están totalmente desencantados con la historia y las críticas no paran de crecer en el espacio digital.

Es probable que, si el proyecto tuviese lugar en épocas en las que el acceso a la información y a la opinión no estuviese tan democratizado, el final se prolongara todavía más. Sin embargo, hoy los espectadores cuentan con la potestad de levantar la voz cuando algo no les gusta y ya sabemos que, si una opinión se convierte en tendencia, en cuestión de horas los deseos de los internautas son órdenes. Por supuesto, las críticas son variopintas y contundentes, pero las que más han llamado la atención de los creadores tienen que ver con que se ha perdido la esencia histórica de la ficción virando hacia un culebrón. Además, a nadie le gustó ver que, en plena pandemia, la propuesta para la distracción también tuviese al Coronavirus como protagonista.

“Cuéntame” ha terminado haciendo realidad la pesadilla de muchos. Y es que los fanáticos de la serie, aquellos que la han seguido en las más de veinte temporadas, temían que los creadores se engolosinaran con el éxito y no supieran parar a tiempo para evitar que la magia se perdiera de tanto frotar la lámpara. Al parecer, es exactamente eso lo que ha sucedido. Todavía no se sabe cómo se cerrará la historia. Hay quienes creen que el corolario podría ser una mini serie de despedida o una TV movie como para que el final no quede en el aire, pero lo cierto es que ese desenlace que espera estar a la altura de las circunstancias podría ser la debacle si tarda demasiado en llegar.