Pensar en Concha Velasco nos genera un sinfín de sensaciones encontradas, fundamentalmente desde que decidió apartarse de los escenarios y accedió a ser ingresada en una residencia geriátrica. Sus problemas de movilidad ya le imposibilitaban vivir sola y de manera independiente y, como está en pleno uso de sus facultades mentales, comprendió que esa salida era la mejor tanto para ella como para su entorno. Desde entonces cada uno de los personajes que la rodean ha tomado trascendencia y Manuela Velasco no es la excepción.

En este país contamos con un estupendo repertorio de familias ilustres en lo artístico y allí también pertenece Concha Velasco, no solo con sus hijos (quienes se desempeñan en el área de producción), sino también con Manuela Velasco, su adorada sobrina. Enumerar las conquistas profesionales de la mayor casi no tiene sentido y a esta altura todo el mundo debe saber que su heredera es una fantástica actriz.

InStyle ha realizado un importante evento en la tarde madrileña del pasado martes y allí ha estado la sobrina de la intérprete. La jornada convocó a decenas de colegas suyos y, fiel a su estilo, Manuela Velasco no tardó en acercarse a la prensa para dialogar de su espectacular presente profesional y también de su intimidad. Pero fue un tópico en particular lo que llamó la atención, quizás porque muchos artistas de su nivel acostumbran a no hablar de esos temas.

Eso que Manuela Velasco tenía para decir

La reportera de “OkDiario”, evidentemente muy consciente de adónde dirigía su pregunta, le consultó a la artista por la maternidad. Inmediatamente y sin intenciones de huir, Manuela Velasco confesó que ya ha intentado todo para quedarse embarazada y que, aunque es posible que suceda un milagro, debe aprender a “despedirse” de esos deseos que resultan imposibles de concretar. ¿Estará al tanto Concha Velasco de las intenciones de su sobrina? Suponemos que sí porque este es el tipo de cosas que no suelen ocultarse en las familias, mucho menos si las relaciones entre los miembros son estupendas.

En adjunto puede apreciarse la naturalidad con la que Manuela Velasco abordaba el tema y su caso realmente sorprende pues, quienes ven trunca la posibilidad de convertirse en madres no suelen tomárselo con tanta calma. No obstante, es posible que ella ya pasara por la etapa de la desesperanza y ahora mismo decide no aferrarse demasiado a aquello que no puede controlar. Mientras tanto, tiene la tranquilidad de que su tía está estupendamente y con nada de ganas de dejarse vencer aún.