La hija de Verónica Forqué, María Iborra, tiene ante sí una decisión que podría cambiar su vida

La muerte de Verónica Forqué significó una gran pérdida para el cine y la televisión española. La ganadora del premio Goya siempre fue muy abierta a expresar sus emociones y no temía en devolver al público el cariño recibido a través de su sinceridad. Las cámaras representaban parte de su zona de confort, y así lo demostró confesando su cansancio cuando renunció al certamen de "MasteChef Celebrity" y marcó un hito en la historia del programa. 

La realidad ha sido diferente para su hija María Iborra, quien siempre se ha caracterizado por mantenerse al margen de las cámaras y cuidar si vida privada de los focos. 

La hija de la actriz española no querría tener que enfrentarse a las cámaras televisivas, aunque se muestra muy agradecida por las muestras de apoyo recibidas en las redes sociales desde la partida de su madre; de momento, esta ha sido la única ventana desde que la que ha querido comunicarse. De acuerdo a varias informaciones, la joven tiene sobre la mesa varias ofertas para ofrecer su primera entrevista, pues han sido mucho los medios que la han contactado para saber cómo afronta esta terrible pérdida.

Recientemente se ha visto a María Iborra disfrutar de la noche madrileña y, aunque visiblemente avergonzada, ha atendido a los periodistas para hablar de cómo la pasa actualmente. María ha confesado que le va "bien" todo y que en los actuales momentos está muy feliz y enamorada. Atraviesa un gran momento profesional, aunque no ha querido desvelar muchos detalles. 

María Iborra recuerda a Verónica Forqué

La hija de Verónica Forqué ha confesado cómo recuerda a su madre y ha reconocido que "con mucho amor"; en este mismo contexto no se negó a la posibilidad de que pueda realizar algún homenaje en su honor, pues por más que pase el tiempo, la sigue teniendo muy presente.

Cabe destacar que, hace unas semanas, María Iborra fue víctima de varias críticas en redes sociales, algo que confiesa que le afecta, pero que no la hace cambiar su personalidad. Queda ante sí la decisión de vender una exclusiva que pueda dilucidar sus planes.