La flamante compañera del Rey Felipe en el cumpleaños de Ingrid Alexandra que opacó a Letizia

La mayor congregación de royals en varios años, finalmente tuvo lugar en el Palacio Real de Oslo, que recibió entre grandes pompas a varias casas reales por el cumpleaños de la princesa heredera Ingrid Alexandra, hija de los príncipes Haakon y Mette Marit de Noruega. Desde el Rey Felipe y Victoria de Suecia como sus flamantes padrinos, hasta el Rey Guillermo y Máxima de Holanda, todos se dieron cita en esta magnánima celebración en la que no faltaron parte de la nueva generación de futuros reyes y reinas, tiaras, discursos emotivos y lágrimas. Además, de una acompañante perfecta en sustitución de la Reina Letizia para acompañar a nuestro Monarca en su entrada triunfal a la casa de Glücksburg.

Todo un despliegue de glamur, protocolo, grandes momentos de lagrimeo y por supuesto los esperados debuts: a la celebración de Ingrid Alexandra nada le ha faltado. Aunque las grandes ausencias como la de la Reina Letizia y sus hijas fue tema de conversación, todo esto gracias a su gran amiga la Reina Máxima, sin que ella así lo quisiera. El motivo sin duda fue el simple hecho de que, tomando en cuenta que como en el caso de la asturiana, la Princesa Alexia también estudia en el Atlantic College y se ausentó de estos fastos, sus padres asistieron junto a su primogénita, la Princesa Amalia. Para pensar un poco ¿no?

Hablando de la heredera neerlandesa, fue justamente ella quien ocupó el lugar de la esposa del Rey Felipe en su recorrido por el gran salón antes de ocupar su puesto de honor en la mesa principal junto a su ahijada Ingrid Alexandra y su familia. Lució preciosa en un hermoso vestido color fucsia que resaltaba su figura y una tiara de mucha carga sentimental para la familia Orange, pues fue la misma que usó la Reina Máxima cuando se casó con el Rey Guillermo.

En cuanto a la homenajeada de la noche, hubo nervios, lágrimas de felicidad y agradecimiento en medio de su discurso. Ingrid Alexandra no dudó en honrar a sus orgullosos padres y abuelos, los reyes Harald y Sonia y al resto de su familia. Fue tan sentido y lleno de graciosos detalles familiares, que emocionó a sus invitadas. En esta oportunidad, la princesa eligió un vestido de Alberta Ferreti en color berenjena y utilizó una tiara perteneciente a la Princesa Ingeborg, la cual lleva en la familia real unos 120 años, según destacó la revista "¡Hola!".

Volviendo al Rey Felipe, fue grato verlo en esta celebración, en un momento tan esperado por Ingrid Alexandra y sus pares nórdicos. Ubicado junto a Mette Marit, el Jefe de Estado compartió con ella algunos momentos entrañables, pues ante la emoción de la madre ante el hermoso discurso de la cumpleañera, el no dudó en reconfortarla tomándola de la mano, muy comprensivo y cercano, no solo darle la enhorabuena, sino para unirse a ella y a Haakon en sentimiento.