El verdadero legado que Jaime Marichalar deja a Victoria Federica, unos pésimos modales

No hay que ser expertos en lenguaje no verbal, como nuestra gran referente en estos temas, Patricia Centeno, para leer entre los gestos de Victoria Federica, que si algo ha heredado por parte de la Infanta Elena, es esa mirada propia de quién siente que el mundo le debe algo. Por mucho, se cree que su actitud flemática se la debe a su línea materna, pero hay medios como "Es Diario" que apuestan por una versión distinta y se cree que la socialité es sin duda la copia viva y al carbón de su padre, Jaime de Marichalar. Sin embargo, no es el único medio que lo expone sin dilaciones, pues el  programa 'Ya es Mediodía' ha sacado un nuevo refrán que afirma esta teoría, "De tal Jaime, tal Victoria".

El exduque de Palma es toda una escuela de maneras para Victoria Federica y Froilán. Cada vez que se encuentra con las cámaras, hace gala de todo sus mal humor para ahuyentarlas. La prueba fue su último encuentro con los medios y esto dió pie a qué en el programa de Joaquín Prat, se considere que es el aristócrata quien inspira el comportamiento poco educado de sus hijos.

Al parecer esta aversión por la prensa le viene a Jaime de Marichalar desde su separación con la Infanta Elena, y hay que admitir que en su momento, algunas informaciones circulantes no fueron precisamente de su agrado. Se había mantenido completamente aparte del interés mediático con éxito hasta que el interés por él se renovó a partir del salto de Victoria Federica como persona pública. Hay que decirlo, son una dupla fantástica y por supuesto, aunque a él le cueste aceptarlo la prensa es necesaria, especialmente para la joven, que está en proceso de construir imagen para convertirse en la digna heredera de su trabajo al frente del mundo de la moda. Sin embargo, la benjamina del de Ripalda no duda en aplicar lo aprendido.

Pero la relación Marichalar- prensa también beneficia a los medios. La atención que generan las idas y venidas de la familia, especialmente las andanzas de Victoria Federica y sus apariciones con su padre suben ratings, incrementan vistas, clicks, y todo aquello que engrosa cifras. ¿Qué mejor prueba de la popularidad del padre y la hija que el aumento de los números del programa televisivo antes señalado? En cifras, Ya es Mediodía subió un 13.8% de audiencia, traducido en un millón 28 mil espectadores, interesados en saber en qué anda el dúo dinámico del gotha nacional.

Precisamente esto se da porque a diferencia de otras celebridades y famosos, a ellos no les interesa airear sus temas privados en público. De hecho, sus intentos de permanecer discretos es uno de sus mayores atractivos. Por ejemplo, en el caso de Victoria Federica, su cumpleaños causó gran interés pues se esperaba una gran celebración, sin embargo el fallecimiento de la Reina Isabel la obligó a optar por una celebración más tranquila junto a sus amigas más cercanas y a puertas cerradas.