La segunda temporada de “El Novato” (Antena 3), el programa de entrevistas de Joaquín Sánchez, tuvo como invitada en su tercera entrega a Tamara Falcó, quien durante meses fue el tema central de platós y de informes del corazón. La tan esperada conversación con Íñigo Onieva concentró la atención de los medios y, a casi tres meses después del enlace, fue uno de los puntos recurrentes del encuentro.

Pese a los buenos números de audiencia cosechados el año pasado, el programa de Joaquín Sánchez continúa en franco retroceso y, en ninguno de sus tres episodios, logró acercarse siquiera a los niveles de audiencia alcanzados en su temporada de estreno.

Primero lo intentaron con Ana Obregón y luego con Roberto, pero no obtuvieron los resultados deseados. Hasta ahora, los peores resultados llegaron cuando la Marquesa de Griñón se sentó a hablar de su boda y a dar consejos sobre cómo poner la mesa.

Eso parece importarle poco, todavía, al exjugador de Betis, quien mantiene su desempeño y, en esta oportunidad, después de algunos momentos de complicidad con Tamara Falcó, puso sobre el tapete su tan esperado casamiento, que se había postergado el año pasado debido a una infidelidad de Íñigo Onieva, que la socialité terminó por perdonar.

El último gran susto que atravesó Tamara Falcó a días de su boda

Luego de meses de muchos nervios, en los que intentó que todo saliera tal cual lo había soñado toda su vida, Tamara Falcó le reconoció a Joaquín Sánchez que le había costado "llegar hasta ahí".

Ya entrada en confianza, la hija de Isabel Presyler se dispuso a contarle al entrevistador uno de los sucesos previos, hasta ahora desconocidos por el gran público, algo extraño cuando se trata de una figura que hace público cada uno de sus movimientos.

"Te voy a contar una cosa que ni siquiera se supo. Cuatro días antes de la boda se quemó el camión de mensajería que llevaba mis zapatos de la boda. Los zapatos, incinerados, insalvables. Entonces, yo dije: ‘Como se entere la prensa’...", contó Tamara Falcó recobrando algunos gestos de sorpresa, como los que seguramente tuvo cuando fue anoticiada del siniestro.

El inconveniente con los zapatos no fue el único. Basta hacer un poco de memoria para recordar el revuelo que se armó cuando la firma española Sophie et Voilà decidió interrumpir el acuerdo firmado para la confección del vestido, denunciando que les estaban pidiendo que copien un vestido.

"No acabábamos de encajar las diseñadoras y yo. Mi idea era la misma que le mandé al siguiente diseñador. Todo el mundo trabaja con inspiración. Después me encontré con el comunicado de prensa que fue un poco agresivo. Terminé un poco mal. Pero ya las pruebas previas habían sido tensas. Es desagradable porque es un momento súper bonito, para disfrutarlo", confesó Tamara Falcó sobre los sucesos más desagradables con los que tuvo que lidiar previo a dar el sí.

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