Infanta Elena
El misterioso saludo de despedida entre el Rey Juan Carlos y la Infanta Elena en su cumpleaños
¿Será alguna tradición desconocida?
La Infanta Elena, que celebró en Madrid su 60 cumpleaños, ha mostrado una enorme satisfacción por el éxito de la convocatoria y, acompañada por su padre, el Rey Juan Carlos, compartió delante de la prensa un peculiar saludo entre ambos en la mismísima puerta del restaurante.
Previo a la partida de Don Juan Carlos, los primeros en retirarse de “Pabú”, en Madrid, donde compartieron una comida, fueron el Rey Felipe y la Reina Letizia, aunque se desconoce si fue por un problema de agenda o por cuestiones más vinculadas al protocolo de la Casa Real.
El almuerzo resultó tal lo planeado por la Infanta Elena, que logró reunir por segunda vez en escasos dos meses a la Familia Borbón, luego del 31 de octubre, cuando la Princesa Leonor celebró su 18 cumpleaños, en una fiesta privada, organizada por los Reyes, que congregó a 150 invitados en el Palacio de El Pardo, incluyendo a los Reyes Eméritos.
El misterioso saludo entre el Rey Juan Carlos y la Infanta Elena
Con motivo del sexto decenio de su hija mayor, el Rey Juan Carlos arribó a Madrid algunas horas antes, procedente de Ginebra y, luego de la comida, pasó unas horas en la casa de un amigo antes de emprender regreso a los Emiratos Árabes.
El detalle peculiar de la escena de despedida entre el Rey Juan Carlos y la hermana del Rey Felipe llegó cuando intercambiaron un saludo, que parece formar parte de un ritual especial entre los dos.
Haciendo la señal de la cruz en sus frentes de manera recíproca, el Rey Juan Carlos y la Infanta Elena, que mantienen una excelente relación, se brindaron un afectuoso beso. Segundos después, la madre de Victoria Federica realizó una reverencia a su padre, como es su costumbre cuando hay presencia mediática.
Para el cierre llegó lo mejor, cuando padre e hija, como si fuera una práctica habitual, se despidieron con un gesto muy peculiar, similar al que ejecutan los jugadores de la NBA, dándose pequeños golpes en el hombro. En este caso, el Rey Juan Carlos y la Infanta Elena se palmearon el pecho uno al otro, causando la sorpresa de los reporteros, que nunca había presenciado una escena así.
