Atrás han quedado aquellos tiempos en los que Rocío Carrasco (45 años) vivía conflictuada y con tantos enemigos que casi evitaba salir a la calle por el miedo que le provocaba encontrarse con alguno. Kiko Hernández (46 años) era uno de ellos, un colaborador que estaba en sus antípodas y que siempre que podía criticaba el modo en que ejercía la maternidad. De ese panorama solo queda el recuerdo.

El tertuliano es uno de los tantos personajes que cambió su perspectiva cuando “la heredera universal” se animó a salir del clóset del silencio. Ahora se arrepiente de todo lo que la criticó en el pasado y sostiene que lo que vimos de ella no fue más que la obra maquiavélica de Antonio David Flores. Pero eso no es todo, ya que el cambio es más profundo.

Es realmente complejo que lleguen a darse relaciones sinceras en el ámbito de los famosos. Sin embargo, de vez en cuando sucede la magia y este parece ser uno de esos casos. Rocío Carrasco está de buenas con su casi colega. Ya son varias las oportunidades en las que lo ha demostrado, pero en las últimas horas le puso un sello definitivo a su nueva amistad.

El plan con el que Rocío Carrasco le demostró su apoyo a Kiko Hernández

Tal como puede apreciarse en las fotografías adjuntas, Rocío Carrasco acudió al estreno del regreso teatral de Kiko Hernández. Lo hizo con Anabel Dueñas, quien es otra de sus amigas y parte del espectáculo en el que Rocío homenajea a su madre. Evidentemente, ambas han quedado muy satisfechas con la puesta en escena y el actor, quien les agradeció públicamente su presencia en el público.

“Las Troyanas” es el nombre de la obra que supone el regreso del madrileño a las tablas. Lo hace como actor en escena (el único hombre) y como productor del espectáculo. Las expectativas las han cumplido ampliamente, ya que en el estreno se agotaron las entradas y, por supuesto, Rocío Carrasco tuvo mucho que ver en ese éxito. Habrá que ver cuánto dura la amistad y, si llega a romperse, cuál será la razón del fracaso.

Un personaje controversial

Kiko Hernández es uno de los colaboradores más antiguos de “Sálvame”. El público siempre opina sobre su figura, dado que suele ser quien arma escándalo con sus colegas al exponer datos de sus vidas privadas.