Iñaki Urdangarin se enfrenta a un nuevo escándalo, alguien que ama está en problemas

Los que pensaban que Iñaki Urdangarin era el gran ganador en el divorcio con la Infanta Cristina, se sorprenderán cuando se enteren que, para conseguirlo, deberá aceptar una condición que afecta a su nueva amada Ainoha Armentia quien, sin comerla ni beberla, terminó adentro de la resolución judicial del conflicto.  

Con el verano como fecha límite para la firma del acuerdo, los abogados de Iñaki Urdangarin y la Infanta Cristina se pasan semanalmente bosquejos con pedidos, reclamos y condicionamientos, que el otro debe analizar y dar el visto para avanzar en lo que, suponen, los liberará a uno del otro.  

El más interesado en que todo se resuelva es el Rey Juan Carlos, a quien le inquietaría toda la información que maneja el ex Duque de Palma, por lo que le habría pedido a su hija que cediera, para que se vaya lo más rápido de la Familia Real. 

Pero la Infanta Cristina quiere vender cara su derrota y le puso una condición a Iñaki Urdangarin: si quiere una mensualidad, una pensión y unas cuantas propiedades, Ainhoa Armentia deberá mantenerse alejada de sus hijos. 

Para la todavía esposa de Iñaki Urdangarin, sería Ainhoa Armentia la culpable de todo lo que sucede y no querría saber nada con la posibilidad de que tuviera cualquier tipo de contacto con Juan, Pablo, Miguel  e Irene Urdangarin. 

El exjugador de balonmano siempre tuvo una relación de cercanía con sus hijos y es habitual verle seguir la carrera deportiva de Pablo Urdangarin, el jugador de Barcelona pareciera ser el que más rápido habría perdonado a su padre.

La que no puede decir lo mismo es Irene Urdangarin, quien, después de ni siquiera cogerle el teléfono a su padre, le levantó el veto, pero tampoco se muestra demasiado animada con la idea de que volvió a engañar a su madre y a dejarla en ridículo.