Pedro Sánchez podría haber arruinado la entrada del Rey Felipe a la gala de la Fiesta Nacional

El Rey Felipe y la Reina Letizia, acompañados por la Infanta Sofía, han asistido en calidad de presidio al acto que conmemora el Día de la Hispanidad. Desde el palco de honor, presenciaron el esperado desfile militar anual, pero una situación completamente inesperada restó un tanto de brillo a su llegada a la Plaza de Lima de Madrid. Esta tuvo como protagonista al presidente de Gobierno, Pedro Sánchez.

Sorpresivamente, hubo un ligero retraso que obligó al Rey Felipe y a su familia a detener el marcado curso de la ceremonia. Pedro Sánchez retrasó su bajada del coche que lo trasladaba para unirse con la familia real y el resto de autoridades nacionales, que aguardaban para proseguir con la jornada. Entre ellos se encontraban la ministra de Defensa, Margarita Robles; el Jefe de Estado Mayor de la Defensa, almirante general Teodoro López Calderón; la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, y el alcalde de la capital, José Luis Martínez Almeida. Así lo difundió 'El Confidencial' en su más reciente edición.

La razón que ocasionó este pequeño incidente justo cuando el Monarca, su Consorte e hija ya habían realizado parte de su recorrido fue una suerte de maniobra a la que el presidente recurrió para intentar evitar los abucheos que suele recibir. Sin embargo, su estrategia no resultó como esperaba.

Pedro Sánchez no logró calcular el momento preciso y, ante el anuncio de su presencia por megafonía, los vítores y aplausos que acompañaron al Rey Felipe, la Reina Letizia y la Infanta Sofía se convirtieron en manifestaciones negativas, abucheos, gritos y hasta insultos. Tampoco faltaron aquellas personas que, a voz de coro, pidieron su dimisión.

Sin embargo, este incómodo episodio rápidamente dio lugar a los actos programados, que homenajean la bandera nacional y a quienes honraron a España a costa de sus propias vidas: el salto paracaidista, el izado tradicional, el desfile militar y, por supuesto, el paso de la patrulla águila por los cielos madrileños con franjas rojas y amarillas en representación de la enseña nacional.