Rafa Nadal lanza el mensaje que todos esperaban sobre Xisca Perelló

Aunque Rafa Nadal es discreto con sus cuestiones personales, el tenista pronunció sus primeras palabras tras el nacimiento de su hijo con Xisca Perelló. Estas últimas semanas fueron tremendas para él porque tuvo que cumplir con varios compromisos profesionales mientras su mujer se encontraba en observación para vigilar su embarazo.

Durante el Open de Estados Unidos, el tenista confesó que debía volver a casa. Aunque debía estar concentrado, tenía la mente en su esposa e hijo. “Tengo cosas más importantes que el tenis qué atender. Ahora es momento de tener mi primer hijo y confiar en que todo salga bien. Mi mujer está bien. Como sabéis, a nivel personal estoy en una situación que es importante para mí. Y tengo que ir gestionando todo”, decía.

Las primeras palabras del deportista después de cinco días -el pasado 8 de octubre nació el bebé en una clínica privada de Palma- eran esperadas por sus seguidores quienes estaban expectantes por el momento, un padre primerizo siempre anda nervioso y cada hora es apremiante. “Hola a todos. ¡Después de unos días y muchos mensajes de cariño sólo quería daros las gracias a todos! ¡Estamos muy contentos y todos muy bien! Un fuerte abrazo”, dijo.

Sólo quería daros las gracias a todos! ¡Estamos muy contentos y todos muy bien!

Al parecer, Xisca Perelló y el bebé se encuentran fuera de peligro, después de haber sido internada semanas atrás. Hoy los tres pueden respirar con calma. El reposo había sido absoluto, pues los médicos habían decidido que la empresaria permaneciera ingresada hasta el nacimiento del niño, quien nació en la semana 37 de gestación, y como lo confirmó Rafa Nadal están viviendo un momento único e irrepetible.

Rafa Nadal hoy quiere centrar toda su atención en el bebé y Xisca Perelló antes de volver a las canchas. El tenista entrena y cuida de ellos, porque tendría un partido a finales de noviembre.

El “sí, quiero”

Xisca Perelló y Rafa Nadal tenían un noviazgo de 14 años y en octubre de 2019 dieron el paso que sellaría su compromiso formal. Dieron el "sí, quiero" frente a más de 200 invitados en una boda de ensueño, celebrada en un castillo del siglo XVII. Tres años después llega su primer hijo Rafa.