NO DEJES DE HACERLA
La receta más sencilla de Callos a la madrileña, para que vuelvas a recordar la cocina de tu abuela
Si eres amante de los platos de invierno, no puedes dejar pasar esta receta.Los callos a la madrileña son de los típicos platos caliente que se sirven en los días más fríos de España, esta receta se elabora con tripas de vaca que, si bien puede dar impresión al explicarlo de esta manera, no se dejen engañar, tiene un sabor que no puedes dejar de disfrutar, generalmente se ofrecen en las casquerías que se encuentran cerca de las carnicerías de Madrid.
Ingredientes para callos a la madrileña para 4 personas
1 Kg .de callos de ternera en trocitos
1 Kg. de Morro de ternera en trocitos
1 pata de ternera partida por la mitad
1 chorizo para guisar
1 morcilla tipo asturiana (para guisar)
2 puntas de jamón serrano
6 dientes de ajo
2 cebollas
Un puñado de granos de pimienta negra
Pimienta negra molida
Sal
Agua
Aceite de oliva
1 bote grande (500 gramos aproximadamente) de tomate natural
1 cucharada de postre de pimentón picante o dulce (al gusto)
2 hojas de laurel.
Elaboración
Para iniciar con la receta de callos a la madrileña es importante poner mucho énfasis en este primer paso, ya que debemos lavar muy bien los callos y el morro, para ello el vinagre, la sal y el agua serán nuestros aliados. Una vez que los tenemos limpios, los colocamos en una cacerola para iniciar la cocción, debe estar destapada, un dato fundamental está en cambiar el agua de la cacerola cuando rompan el hervor, luego añadimos la pata, las puntas de jamón, el chorizo, los cuales desgrasamos en el microondas en dos minutos.
Por otro lado, picamos las cebollas muy finitas y las agregamos junto con el tomate, el laurel y los ajos enteros. Para que la preparación alcance la cocción justa es necesario agregarle medio litro de agua, salpimentamos agregando granos de pimienta al agua y dejamos que a fuego lento vaya tomando forma nuestro menú.
El secreto de esta receta de Callos a la madrileña está centrado en ir probado el punto de cocción de las estrellas del plato y si es necesario agregar agua, sin excedernos pues los callos suelen tener mucha consistencia y no queremos que nuestro plato pierda el sabor por exceso. En este punto es cuando vamos a preparar el sofrito picante, el cual agregaremos a la cacerola, y por último la morcilla, la cual solo necesita quince minutos al fuego, una vez que esto haya sucedido, lo podemos servir en cuencos para conservar el calor. Si esta receta te gustó, te invitamos a echarle un vistazo a otro plato típico como son las Tortilla de patatas Betanzos. ¡Buen provecho!