El adiós para siempre que ha marcado la reaparición de Charlène de Mónaco

Antes de conocer y casarse con el Príncipe Alberto de Mónaco, Charlène de Mónaco era una talentosísima nadadora que competía por Sudáfrica en los Juegos Olímpicos. Ahora, tras doce años de matrimonio, se puede decir que su vida ha cambiado rotundamente y no solo eso, sino que también su apariencia. 

En este sentido, desde que se la conoce en el ambiente de la realeza, la exnadadora se vio envuelta en un mar de rumores y preocupaciones. Lo primero de tratarse es con el tema del matrimonio y lo segundo, es por su salud, que durante los últimos tiempos se complicó.   

Pero esto no es todo. A sus 45 años, Charlène de Mónaco estuvo varias veces intervenida por el aspecto físico para hacerse uno que otro retoque estético.  

Si pasamos lista de ellos, podemos mencionar que a la esposa de Alberto II de Mónaco le hicieron, en su primer momento, una rinoplastia para perfilar su nariz, luego un aumento de pecho, pese a que esto no se confirmó, después los pómulos y las líneas de expresión de su rostro, entre otros detalles.  

Además, fuera de lo quirúrgico, pero estando en la misma línea estética, son los famosos cortes de cabello que se realiza los que más llaman la atención. 

En referencia a los retoques de Charlène de Mónaco, la doctora Mirella Garrigós Pascini, dermatóloga en la Clínica Kalosia by Paloma Borregón, explicó para vanitatis.com que la ausencia de arrugas en la frente de la esposa de Alberto de Mónaco, sería gracias al “tratamiento habitual con toxina botulínica”.  

Otro experto, el médico estético José Barbosa, indicó que Charlène de Mónaco “tiene el mentón muy perfilado y, en general, todo el óvalo facial”, algo que podría deberse a un lifting facial y que, los retoque en los labios es posible gracias al ácido hialurónico.