Vida Sana
Dietas: De qué se trata el ayuno intermitente, cómo hacerlo y sus beneficios
La gran ventaja de esta forma de alimentación radica en su adaptabilidad a la vida cotidiana.
El ayuno intermitente, una práctica alimentaria que alterna periodos de ayuno y consumo de alimentos, ha ganado popularidad como una estrategia para mejorar la salud, el rendimiento y la composición corporal en el nuevo año.
Fasting es una parte intrínseca de nuestras vidas diarias, desde la última cena hasta el desayuno que rompe este periodo de ayuno. El ayuno intermitente propone extender este periodo durante horas o incluso días, y se ha destacado por sus beneficios para la salud y la pérdida de peso.
Existen dos tipos principales de ayuno intermitente: el diario y el semanal. En el diario, se ayuna durante 16 horas cada día, seguido de un período de 8 horas para comer. Este método simple implica dividir el día en dos franjas horarias: una de 8 horas para la alimentación y otra de 16 horas para el ayuno, siendo una opción efectiva y fácil de seguir.
Las 16 horas de ayuno suelen incluir las horas de sueño, haciendo que sea más manejable de lo que parece a primera vista. Para facilitar aún más la transición hacia este patrón alimentario, se presentan dos opciones de dieta del ayuno 16/8, una enfocada en la mañana y la otra en la tarde.
La gran ventaja del ayuno intermitente radica en su adaptabilidad a la vida cotidiana. Esta dieta se ajusta a tus necesidades y compromisos, convirtiéndola en una opción viable y efectiva.
Beneficios del ayuno intermitente
1. Ayuda a adelgazar: reducción de calorías diarias y utilización de las reservas de energía durante el ayuno.
2. Bajo índice de abandono: estudios sugieren que tiene la tasa más baja de abandono, gracias a su simplicidad y fácil comprensión.
3. Prevención de la diabetes tipo 2: investigaciones indican un efecto positivo en la reducción de los niveles de azúcar en sangre.
4. Mejora de la inflamación: procesos relacionados con la inflamación pueden mejorar con la práctica del ayuno intermitente.
Durante el ayuno intermitente, se puede consumir: agua, café sin azúcar (con canela opcional), té, infusiones para adelgazar; caldo casero de verduras (cebolla, puerro, zanahoria, col, apio) con una pizca de sal y, si se prefiere, granos de pimienta o clavo; y chicle sin azúcar para reducir el apetito.
Evita consumir azúcar, edulcorantes, alcohol, leche, bebidas vegetales, zumos o refrescos, incluso versiones light o zero, ya que contienen calorías.
El éxito del ayuno intermitente no solo depende del periodo de ayuno, sino también de las elecciones alimentarias durante las horas de consumo. Siguiendo el método del plato de Harvard, se sugiere que la mitad del plato contenga verduras, un cuarto sea proteína (carne, pescado o legumbres), y el otro cuarto consista en patatas, pan, arroz o pasta. Opta por alimentos frescos y evita los procesados y precocinados.
