María Teresa Campos en problemas: Bigote Arrocet podría volver para terminar de desestabilizarla

María Teresa Campos no estaba pasando por su mejor momento desde su separación de Bigote Arrocet a finales de 2019, un suceso que marcó un antes y un después en su vida, pues tenía muchos planes con el argentino. 

Luego de sacar un disco al que llamaron "Una bella historia", la relación entre ambos fue a la par de su álbum: ninguno tuvo éxito. Esta ruptura significó una gran depresión para la periodista, quien no podía superar la separación.

Como si fuera poco, a esto se le sumó la pandemia. Al ser persona de riesgo, la comunicadora de 79 años tuvo que permanecer meses sin poder salir de su hogar, al igual que muchos adultos mayores, lo que la llevó a crear un canal de YouTube. 

Allí entrevista a distintos personajes y mucho se especuló acerca de una posible reunión con su expareja, Edmundo Arrocet, y ahora resuena con más fuerza este rumor luego de que María Patiño confirmara que el argentino llegaría a España desde Chile, en donde se encuentra luego de abandonar el país tras dejar a María Teresa Campos por WhatsApp.

Bigote Arrocet fue un gran apoyo para María Teresa Campos, por eso mismo es que a ella le costó tanto salir adelante, pero logró hacerlo y ahora María Patiño teme que su amiga vuelva a recaer en manos del cantante. 

La presentadora de "Socialité" habló este domingo 7 de marzo y envió un mensaje a la expareja de su colega, quien no quiere que se le acerque ni le toque un pelo, ya que podría remover sus emociones con la posible vuelta a España. 

Es mucha casualidad que Edmundo regrese justo cuando María Teresa está a punto de estrenar su nuevo programa. Cabe la posibilidad de que la desestabilice.

Patiño aseguró que María Teresa Campos está pasando por un buen momento con su nuevo proyecto, "La Campos Movil", que se estrenará el próximo miércoles 10 de marzo a las 22 horas por Telecinco, lo cual la tiene muy ilusionada y su amiga no quiere que nada malo le pase.

Que venga a casa, que se mueva donde quiera, pero que a mi Campos la deje en paz.