Cuando llevamos la mente hacia el pasado, en el ejercicio de rescatar los mayores baluartes de nuestra cultura, indefectiblemente, aparece Camilo Sesto. Fue uno de los principales íconos españoles de la música romántica y sus coplas siguen sonando cada vez que una persona necesita arte para decir lo que las palabras no pueden. Su vida fue puro esplendor, aunque no en todos los sentidos.

En la actualidad, es el hijo del artista, Camilín, quien generalmente acapara las miradas. Lamentablemente, ha sido ingresado más de una vez producto de su consumo problemático de ciertas sustancias, situación por la que su madre, Lourdes Ornelas, ha tenido que pedir ayuda en más de una oportunidad. Pero, mucho antes de que esto sucediera, otros aspectos de la vida del intérprete se ponían en duda.

Es ampliamente conocido que el oriundo de Alcoy fue un galán con todas las letras. Siempre estaba rodado de mujeres y de hecho muchas de ellas incluso hoy aseguran que tienen hijos suyos no reconocidos. Pero, aun así, muchos creían que en realidad esa imagen de hombre irresistible que proyectaba no era más que una pantalla para ocultar sus verdaderos intereses: que quizás lo atraían más los hombres.

La respuesta definitiva de Camilo Sesto a la pregunta más recurrente

“El Chato” visitaba con frecuencia platós de televisión para ser entrevistados. Hace algún tiempo, el segmento “Hormigas Blancas” que conducía Carlota Corredera rescató del archivo uno de esos momentos y el material vale tanto como una joya. Camilo Sesto reconoció que era un hombre de muchas mujeres, que su perdición era la intimidad con ellas y se declaraba orgulloso de ser un romántico, atributo que muchos confundían con la femineidad.

A veces me lío y soy hombre de muchas mujeres.

“Sé quién puede pensar que yo soy afeminado, soy romántico, eso sí, tal y como demuestran mis canciones”, dijo el vocalista confirmando que no lo preocupaban en lo más mínimo las opiniones ajenas sobre lo que hacía o no con su vida privada. Por supuesto, los rumores no desaparecieron luego de esa entrevista, pero al menos dejó en claro que ya no tenía intenciones de seguir siendo consultado por el mismo tópico.

De avanzada

Además de cantante, Camilo Sesto también fue productor artístico. En ese sentido, uno de sus trabajos más destacados fue “Jesucristo Superstar”, una obra de teatro muy crítica con la religión católica.