Ni siquiera la pasividad de la lejana Abu Dabi logra que los medios desvíen su atención del Rey Juan Carlos, que a pesar de pasar casi desapercibido durante su visita a Sanxenxo a regresado a las primeras planas después de que una publicación revelara la posibilidad de que exista una hija extra matrimonial, que se sumaría a otros dos que reclamaron largamente su paternidad.  

Los periodistas José María Olmo y David Fernández publicaron hace semanas un libro titulado "King Corp. El imperio nunca contado de Juan Carlos I" (Libros del K.O.), en el que, en base a una larga investigación sobre muchos de los secretos del Rey Juan Carlos, retoman la teoría de Pilar Eyre y afirman que el Emérito tiene una hija extramatrimonial, que se llamaría Alejandra.

Aunque se desconoce su apellido, los autores fundamentaron que sería hija de una aristócrata algunos años mayor que el Rey Juan Carlos, quien estaría al tanto de la situación y que a lo largo del tiempo entabló una relación con su presunta primogénita. 

Esta no es la primera vez que se menciona la posibilidad de que el Rey Juan Carlos tenga más que los tres hijos que conocemos: el Rey Felipe, la Infanta Elena y la Infanta Leonor. Desde hace décadas hubo dos personas que reclamaron la paternidad del exMonarca y que jamás recibieron una respuesta, aunque sí la mirada de los medios. 

¿Quiénes son los otros supuestos hijos ilegítimos del Rey Juan Carlos?

El primero que salió a ventilar a los cuatro vientos que quería ser reconocido como el hijo mayor del Rey Juan Carlos, y por consiguiente aspirante al trono en reemplazo del Rey Felipe, fue Albert Solà.

Nacido en 1956, hijo de una madre soltera de la que separaron cuando era pequeño, Albert Solà fue criado en Ibiza por una familia acomodada y uno de los gestos que más tarde llamarían su atención es que "alguien les pagaba 900 pesetas cada trimestre por la lactancia".

Aunque Albert Solà dedicó los últimos años de su vida estuvo a recolectar pruebas para comprobar que era hijo del Rey Juan Carlos, jamás recibió ningún tipo de reconocimiento y murió en octubre pasado.

La segunda que reclamó sus derechos filiatorios fue Ingrid Sartiau, que nació en Bélgica, en 1966. "Este hombre es tu padre, me dijo, cuando aparecían unas imágenes del Rey de España en una cadena belga", explicó hace unos años en “Vanitatis” sobre los relatos de su madre, que supuestamente le contó que conoció al Rey Juan Carlos en una feria de Luxemburgo y nueve meses después nació ella.

Cuando Ingrid Sartiau descubrió la existencia de Albert Solà se unió a su lucha pero desde la justicia le dieron la espalda al considerar que no contaban con las pruebas suficientes.