Las cosas entre el Rey Juan Carlos y Froilán se pusieron tensas una vez más. Al parecer, se le acabó la paciencia al abuelo sobreprotector, quien está dispuesto a casi todo por sus nietos. Aunque hay algo que no está dispuesto a resignar, por lo que el Emérito ha decidido poner un freno.

De regreso al país para disfrutar de unos días de regatas en Sanxenxo, el Rey Juan Carlos está muy expectante de cada uno de los pasos de Froilán, que también ha hecho un alto para tomarse unas vacaciones por España.

Se sabe que este año el hijo de la Infanta Elena se ha mudado y que ha hecho de Abu Dabi su refugio, amparado por el Rey Juan Carlos y algunos beneficios que le consiguió para que el chaval lleve una vida de lujos. 

Sin embargo, el protectorado puede terminar siendo un arma de doble filo para el Emérito, que además de tener a su nieto preferido cerca, tiene que velar por su buen comportamiento, ya que teme que otro marrón termine complicando, aún más, su relación con el Rey Felipe. 

Las debilidades de Froilán que ponen en peligro al Rey Juan Carlos

Froilán tuvo que coger un avión que lo depositó en Emiratos Árabes durante marzo, después de que, según él, la prensa lo agobiara y lo siguiera constantemente. Lo cierto es que su nombre y la palabra escándalo ocuparon varios días en la prensa rosa, que llegó a tenerlo entre sus predilectos.

Claro, el cuarto en la línea sucesoria del trono tiene 25 años y una fortuna digna de ser utilizada para disfrutar de las bondades que ofrece la noche madrileña, en la que tiene mucha experiencia. 

Todo esto es una bomba de tiempo para el Rey Juan Carlos, que aunque sus amigos insisten en que no tiene planes de radicarse en España, sí pretende venir más seguido. Y ahí es donde Froilán podría convertirse en una piedra más dentro del zapato.

Eso llevó al Rey Juan Carlos a mantener una fuerte discusión con Froilán, en la que el exMonarca le dejó en claro que no volverá a interceder en caso de que vuelva a cometer otro error.