La herencia de María Teresa Campos, qué se repartiran sus hijas

Luego de una internación, María Teresa Campos, una indiscutida eminencia de la comunicación, nos dejaba este lunes, a los 82 años, en la capital madrileña rodeada de todo el amor de sus hijas, yernos y nietos.

La ausencia de este mundo de la legendaria comunicadora hizo que los medios comenzaran a especular acerca de su patrimonio y qué de todo aquello le tocaría a sus hijas.

Los años en los que María Teresa Campos trabajó fueron prósperos. La irrupción de las cadenas de televisión privadas en 1990 fue una oportunidad que no dudó en tomar para pasearse por todos los canales que se peleaban por mejorar su contrato y quedarse con la frescura y elocuencia profesional de Campos.

La periodista participó en las mejores cadenas televisivas, lo que le hizo amasar una gran fortuna. Tal era su éxito que su participación especial en otros programas ostentaba el precio de 30.000 euros. En el inicio de los años 2000, llegó a hacerse con la suma de 3 millones de euros al año.

La fortuna de María Teresa fue invertida en inmuebles, aunque su preferida siempre fue una mansión en Las Rozas, Madrid. Además, tenía otra vivienda en dicha ciudad y 2 más en Málaga.

Durante el 2017, reorganizó su patrimonio y vendió una de las propiedades por 1,3 millones de euros y luego de luchar con la vivienda de Las Rozas que le costaba 10.000 euros de impuestos, logró venderla por 2,5 millones, aunque el precio inicial era de 4,5 millones. Las ganancias que esperaba solo supusieron pérdidas, pues mientras las tuvo en su poder debió gastar aproximadamente 3 millones en reformas.

A sus últimos años, la locutora los ha pasado en un alquiler de Aravaca, con el objetivo de estar más cerca de sus hijas, que ahora esperan lo que queda de su legado financiero.